La Casa Magnética (1974-1998)
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La Casa Magnética (1974-1998).
En el parque de atracciones de Montjuïc había una atracción que se llamaba «La Casa Magnética». Consistía en una sala inclinada y poco iluminada donde entrar era sencillo, pero intentar salir, parecía imposible.
La casa magnética era la representación de un salón comedor. El suelo era una rampa muy pronunciada y para salir tenías que subir la rampa. Al final había una butaca «pegada» al suelo, como el resto del mobiliario y, si te dejabas caer por la pendiente, chocabas con una pared acolchada. ¡Menudos topetazos se pegaba la gente contra la pared! Eso si no se daban antes contra la mesa que estaba en el centro.
La luz «negra» y la inclinación del suelo ayudaban un poco a dar la sensación de que la pared te atraía hacia ella, de ahí su efecto «magnético».
Casa Magnética de Montjuïc: Una Maravilla de Sencillez
La Casa Magnética no fue concebida por arquitectos renombrados, sino por el propio parque de atracciones. Su diseño sencillo, sin grandes pretensiones, se convirtió en su mayor fortaleza. Aunque muchos podrían haber subestimado su modestia, fue precisamente esta simplicidad la que le permitió destacar entre las maravillas más elaboradas del parque. La Casa Magnética estaba situada al lado del Ciclón.
Un Vínculo con el Pasado: La Reforma de los Años Setenta
Fue durante la reforma de mediados de los años setenta cuando la Casa Magnética vio la luz por primera vez. Aprovechando los recursos disponibles y sin perder de vista el objetivo de sorprender a los visitantes, el parque dio vida a esta atracción magnética. Desde entonces, su misterio y magnetismo han dejado una huella imborrable en la memoria de aquellos que la han experimentado.
El Fascinante Origen de las Casas Magnéticas: Un Viaje a Través del Tiempo
Las Casas Magnéticas, esos misteriosos recintos que desafían nuestras percepciones, tienen su origen en Estados Unidos. A lo largo de la historia, estas atracciones únicas han evolucionado desde simples cabañas inclinadas hasta complejas maravillas con efectos visuales y sensaciones falsas. En este artículo, exploraremos el emocionante viaje de las Casas Magnéticas, desde sus humildes comienzos hasta las increíbles versiones actuales que nos asombran en parques de todo el mundo.
Los Inicios en Estados Unidos: El Genio de Arthur B. Griffen
La historia de las Casas Magnéticas se remonta a los Estados Unidos, donde un visionario llamado Arthur B. Griffen diseñó la primera versión conocida. Todo comenzó con la idea de montarla en una feria, y para ello, creó una cabaña de madera con elementos domésticos, pero con un detalle sorprendente: una ligera inclinación que desafiaba las leyes de la gravedad. Como parte de una tendencia de la época en la que se exploraban los efectos visuales y las ilusiones, esta atracción resultó ser un rotundo éxito, capturando la imaginación de los visitantes y dejándolos con la pregunta de cómo era posible tal fenómeno.
De la Simplicidad a la Perfección: La Evolución de las Casas Magnéticas
Con el paso del tiempo, las Casas Magnéticas fueron sometidas a mejoras y perfeccionamientos continuos. Se añadieron habitaciones con distintas inclinaciones, efectos de agua y objetos que se movían en contra de la gravedad, todo ello para reforzar la falsa sensación de estar en un mundo fuera de lo común. Estas casas se hicieron conocidas bajo diferentes nombres como «Tilt House», «Mystery Shack» y «Tipsy House». Eventualmente, la denominación «Casa Magnética» también se popularizó en castellano.
Resistencia al Paso del Tiempo
A pesar de los años transcurridos, la Casa Magnética se mantuvo prácticamente intacta hasta el día de su clausura. Su bajo coste de mantenimiento fue un factor clave en su conservación. Pero más allá de las cifras y las estadísticas, es su capacidad para seguir asombrando a los visitantes lo que ha asegurado su lugar especial en el corazón de quienes la han conocido. Como anécdota, decir que fue la última atracción que quedó en pie una vez desmantelado todo el parque, incluso seguía conectada la luz negra y funcionaba como siempre.
Un Legado que Perdura
La clausura del parque de atracciones no significará el olvido de la Casa Magnética. Su legado perdurará en la memoria colectiva de aquellos que se dejaron llevar por su magnetismo y en las fotografías que capturaron su esencia. Además, es posible que su historia y su influencia inspiren futuros proyectos arquitectónicos, recordándonos que la grandeza no siempre reside en lo ostentoso, sino en la capacidad de maravillar con lo simple.
La Casa Magnética de Montjuïc representa un tesoro arquitectónico que nos recuerda que la simplicidad puede ser la fuente de la belleza más duradera. Su modestia no la limitó, sino que la hizo única y atemporal. A través de los años, su espectacularidad ha perdurado, y su legado seguirá vivo en los corazones de quienes alguna vez se dejaron magnetizar por su encanto. Mientras el parque cierra sus puertas, la Casa Magnética trasciende el tiempo y se convierte en un símbolo perdurable de asombro y admiración.
¿Tienes algún recuerdo bonito (o no) relacionado con esta atracción? Si quieres compartirlo con nosotros dejándonos un comentario, nos encantará.
La Casa Magnética (1974-1998) – Editado por Esther Bose y Josep Pérez
A mi me tenía fascinado, lo que no acabo de entender es que…. con tan poca pendiente la sensación fuese tan exagerada de «atracción hacia atrás» … ¿cómo estaba hecho eso? xDDD
La pendiente no era poca, al contrario. Lo que pasaba, es que al entrar en la atración pasabas por unos pasillos inclinados de forma extraña que te desorientaban y al llegar al salón en cuestión no tenías la sensación de que estuviese inclinado. Pero claro, TODO estaba inclinado, como si de una caja se tratase, las paredes guardaban la perpendicularidad con el suelo y el techo y visualmente no notabas la inclinación, pero la pendiente era tremenda. A mi también me tenía fascinado, con ese efecto de fluorescencia con la luz negra y las paredes y los muebles brillando en la oscuridad…
Hola! Que bueno haber encontrado sobre la casa magnética!
Os quería preguntar si sabéis quien fue el arquitecto o diseñador de esa atracción!
Saludos
Mi anécdota personal fue, con ocho años, descubrir que imitar a un adulto que saltaba como una rana (en cuclillas me refiero) no fue una buena idea.
Ayer estuve en la casa magnética de Zaragoza, en el parque de atracciones. Grabe un vídeo en ella. Siempre pensé que había algo hasta que os he leído hoy.
No me lo podía creer, nunca entendí la atracción que había en esa pared. Durante muchos años lo contaba y nadie me creía. Yo fui al parque en el 88.
¡Gracias por compartir tu experiencia! Es sorprendente cómo cada visita al Parque de Montjuïc puede revelar algo nuevo. En 1988, la experiencia debió de ser aún más única. ¡Nos encantaría escuchar más sobre vuestras experiencia en el parque! Saludos