Camas Elásticas (1967-1998)
3 minutos de lecturaLas camas elásticas (1967-1998) eran una de las atracciones más sencillas que hubo en el Parque de Atracciones de Montjuic.
Permanecieron en el parque desde su apertura hasta el cierre del mismo, haciendo las delicias de los más pequeños.
Estaban instaladas en la planta infantil, y su funcionamiento era bien sencillo. Consistía en una especie de lonas elásticas sujetadas por muelles sostenidos por una estructura metálica, y la diversión consistía en saltar sobre ellas, haciendo piruetas y disfrutando de la sensación de ingravidez en cada salto.
A menudo, el reto consistía en alcanzar la máxima altura posible, impulsándose con el propio cuerpo, lo que la convertía, además, en un excelente ejercicio y fuente de relax.
Historia de las camas elásticas
El origen de las camas elásticas se sitúa en torno a los años 30, cuando se crearon con el objetivo de ayudar a los saltimbanquis a desarrollar nuevas acrobacias para sus espectáculos.
Pero eso fue sólo el principio, porque ya en los años 50, nacieron los primeros centros de saltos, situados en las gasolineras para distraer a los niños mientras que sus padres llenaban el depósito de gasolina del coche.
Esta es la parte más lúdica de las camas elásticas (también llamadas trampolines), pero su utilidad se extendió mucho más allá de la simple diversión.
Así, en la Segunda Guerra Mundial, la Escuela de Vuelo de la Marina de los EEUU creó uno de estos trampolines para facilitar la formación de los pilotos, mejorando su estado muscular, su equilibrio y ayudándoles a un mayor control corporal.
Estas rutinas fueron de utilidad también para la eliminación del miedo a las alturas y el desarrollo de giros y volteretas que familiarizasen a los pilotos con las acrobacias que debían realizar durante el vuelo.
También la NASA encontró en los trampolines buenos aliados para la preparación de los astronautas, ayudándoles a su desarrollo muscular, la mejora de su respiración durante el ejercicio y la toma de contacto con la sensación de ingravidez propia del espacio.
Desde el año 2000, también forman parte de los Juegos Olímpicos, tanto en categoría masculina como femenina.
Tal es la versatilidad de estos sencillos aparatos que llegaron para quedarse, adaptándose a múltiples utilidades y beneficios, como hemos podido comprobar.
Anécdotas y sorpresas en las camas elásticas de Montjuic
Las camas elásticas del Parque de Atracciones de Montjuic permanecieron en su misma ubicación durante toda la vida del parque.
A mediados de los años 80 se suprimieron entre 4 y 6 camas elásticas para colocar en su lugar un hinchable cerrado, de payaso, y a su lado, un tren infantil, posiblemente de la empresa Falgas.
También en esa época se realizaron modificaciones en los muelles de las camas elásticas, a fin de evitar los pequeños accidentes que, a menudo, se producían.
Estas modificaciones consistieron en dotar de protecciones a los muelles, mediante una especie de cojines forrados en verde (al principio, luego fueron sustituidos por otros de color rojizo). Con ello se evitaba que se colasen entre los resortes las piernas de los usuarios y las usuarias de la atracción.
Una diversión adicional era buscar “tesoros” bajo las lonas de estas camas elásticas ya que, al saltar sobre ellas, era frecuente que cayesen todo tipo de objetos que portaban los saltadores.
Así era posible encontrar gomas de pelo, pendientes, pulseras e incluso alguna moneda.
¿Has disfrutado de esta atracción?, ¿tienes alguna anécdota relacionada con las camas elásticas que quieras compartir?
Si es así, puedes enviar tus recuerdos, fotografías y los compartiremos para mantener viva la memoria de nuestro querido Parque de Atracciones de Montjuic.
Camas Elásticas (1967-1998) editado por Esther Bose y Jose Pérez, con la colaboración de Jose Manuel Castro y Antonio Jimenez.